La salud y seguridad de los consumidores es siempre una prioridad para los fabricantes de productos cosméticos. Cuando adquirimos un producto cosmético en el mercado formal, tenemos la certeza que ya pasó por varias pruebas que corroboran su seguridad y eficacia, antes de estar a nuestro alcance. Los procedimientos que se establecieron desde hace varias décadas para determinar la seguridad de los productos cosméticos se conocen como pruebas de seguridad. Las más recientes involucran nuevas tecnologías a lo largo de la historia y se conocen como métodos alternativos.
Los métodos alternativos representan los esfuerzos y compromisos de la industria cosmética por cambiar continuamente, siempre ajustándose a mejores prácticas y buscando nuevas tecnologías que puedan ayudar a la evaluación de los productos. Toman en cuenta la innovación y los avances de la ciencia para poder valorar los productos en tejidos sintéticos, por ejemplo, incorporar modelos informáticos y matemáticos para hacer predicciones sobre los posibles riesgos de un ingrediente nuevo, con base en los datos de ingredientes convencionales.
Actualmente en México y en el mundo continúan surgiendo nuevos métodos alternativos para probar la eficacia y seguridad de uso de productos cosméticos. Muchos de estos nuevos métodos traen consigo grandes ventajas, como probar rápidamente que un cosmético es seguro de usar, a comparación de una prueba de seguridad tradicional que puede tomar meses.
Finalmente, es importante resaltar que, si bien la ciencia evoluciona rápidamente, aún hay muchas áreas de oportunidad que se sigue explorando y estudiando por parte de la Industria Cosmética.
Por ello, es importante adquirir tus productos cosméticos dentro del mercado formal de empresas confiables y comprometidas con la salud de los consumidores, que están innovando constantemente para llevar a tu alcance productos seguros y eficaces que cuiden tu salud y la de tu familia. #CuidaTuBelleza
