Lo que significa ser mamá

La Verdad de Ser mamá: Amor, Sacrificios y la Magia de Criar Hijos

Contrario a lo que puede aparentar, el ser mamá no significa solo cambiar pañales, calentar biberones, pelearte con los purés, llevar a los niños a la escuela, esperarlos mientras llegan a casa después de una fiesta y regañar… pues la verdad es que va mucho más allá de eso, los pañales y biberones son solo el comienzo.

Desde el momento en el que te dan la noticia y te dicen que serás mamá, todo en tu interior cambia, un sentimiento diferente te invade y después llegan los verdaderos retos, pero también llega el momento en el cual una madre se da cuenta de que es capaz de hacer cualquier cosa por un nuevo mundo al que le ha dado vida y entrega su amor incondicional en la versión más pura.

Ese nuevo mundo, es ese hijo en el que hay puestas millones de ilusiones. Ser mamá significa cambiar tu vida por completo, tu tiempo, así como dejar de lado muchas de tus necesidades por darlo todo a quien más amas, pues ¿Qué no estaría dispuesta a hacer una madre por sus hijos?, significa dar todo tu corazón y tus fuerzas cada día para sacar a tus hijos adelante, enseñarles a vivir, a convertirse en la mejor versión de ellos mismos, motivarlos y pensar más allá de los límites.

También significa que les enseñes que la belleza y el bienestar vienen de adentro, que una sonrisa será el mejor maquillaje y la mejor puerta de entrada con los demás.

Sin duda, ser mamá también es enfrentar esos momentos difíciles en los que solo quieres encerrarte en el baño y llorar, es sentirte la peor persona del mundo tras darle ese primer manotazo a tu hijo(a) para ponerle límites y reglas, pero también es querer aprovechar y exprimir cada momento al máximo, tanto así que deseas que el tiempo no pasará tan rápido. En este momento, llegan los sentimientos encontrados al ver cómo tus hijos crecen, sintiendo dicha y nostalgia cuando avanzan dando pasos de gigante por la vida.

Cuando todos hablan del amor sincero de una madre, solo tú lo puedes entender que tiene sus contradicciones, pues si bien es un amor generoso e infinito, también es un amor lleno de sacrificios que implica seguir los pasos de unos pequeños maestros… tus hijos, y solo por ellos eres capaz de sacrificar tiempo para ti y lo que te gusta desde esa rutina de maquillaje que te encantaba hacerte, salir con las amigas por la noche o hacer ejercicio a diario, es verdad, eres capaz de dedicarte menos tiempo para arreglarte con tal de que ellos estén limpios e impecables.

La maternidad no significa sonreír siempre, ni verte impecable todo el tiempo, ser mamá también es llorar a mares, son muchas noches de insomnio y desvelo, significa un sinfín de preocupaciones; horas de correr tras sus hijos; días, meses y años inventando cientos de maneras para camuflar las verduras; aguantar peleas y tolerar con toda la paciencia del mundo la infinidad de sorpresas que tiene la vida. Sí, un cúmulo de emociones que al final del recuento estarías dispuesta a volver a vivir.

Y es por todo esto que hoy te reconocemos y te damos las gracias, por la gran labor que haces ya que no solo contribuye a lo más importante, tu familia, sino a la sociedad en general. Te queremos felicitar por todo el esfuerzo, por intentar y lograr cosas importantes cada día y no darte por vencida, gracias por darles las alas a tus hijos y permitirles volar alto muy alto, porque estos días y siempre sin duda lo mereces todo.